Hay que tomar un «protector» – Actualmente el ibuprofeno, el paracetamol y la aspirina son considerados analgésicos menores susceptibles de automedicación, algo que en muchos casos no debería ocurrir, aunque no son pocos los profesionales de la salud que consideran que en casos puntuales de dolores leves esta automedicación puntual sí debería efectuarse,
La realidad es que depende, dado que muchos pacientes que se automedican también sufren otras enfermedades basales, y tomar un solo ibuprofeno puede desencadenar consecuencias nefastas. En el caso del ibuprofeno y los antiinflamatorios en general se conoce sobradamente su potencial lesivo a nivel estomacal, siendo una de las primeras causas de úlcera gastrointestinal,
Por ello, no son pocos los individuos que preguntan si es necesario tomar un «protector» de estómago cuando se toma ibuprofeno. La realidad es que no: no está indicado tomar ningún tipo de protector gástrico siempre que se tomen antiinflamatorios, Sí está indicado en determinados casos, dependiendo sobre todo de la edad del paciente en cuestión, y de sus enfermedades previas.
¿Cómo tomar ibuprofeno y omeprazol?
Protectores – Es aquí donde entra en juego el medicamento que hasta 2015 era el más vendido de nuestro país, con un total de 54,4 millones de envases : el omeprazol, Este es un inhibidor de la bomba de protones o, dicho de otro modo, dificulta a la pared gástrica producir ácido clorhídrico, lo que hace que el contenido estomacal sea menos agresivo y, por tanto, se irrite menos. Foto: iStock. Es un mediacamento que se receta mucho más de lo necesario. De hecho, según la Sociedad Española de Patología Digestiva (SEPD), » entre el 54% y el 69% de las prescripciones de IBP (inhibidores de la bomba de protones) son inadecuadas». Se ha usado como remedio para todo, aprovechando su aparente ausencia de efectos secundarios (aunque el propio prospecto avisa de que puede provocar estreñimiento, náuseas, vómitos, inflamación, mareos e incluso convulsiones).
De todos modos, los beneficios que este medicamento puede proporcionar a nuestro organismo frente a los efectos que tiene el ibuprofeno sobre el sistema digestivo son más que notables. Es por eso que la recomendación oficial es consumir omeprazol por las mañanas, antes de la ingesta de ibuprofeno, si el tratamiento con este analgésico se va a extender durante más de dos semanas.
Eso sí, los efectos del protector gástrico no son inmediatos, sino acumulativos. Es por esto que si vamos a tomar ibuprofeno 3 días, tomar este inhibidor de la bomba de protones para ‘proteger’ nuestro estómago no nos hará ningún bien, En todo caso, lo único que hará será meter más fármacos en nuestro sistema,
Más de 44 millones de cajas de ibuprofeno compramos los españoles en el año 2016, según la lista de fármacos más vendidos publicada por el Ministerio de Sanidad. Esta molécula, que es comúnmente comercializada en forma de pastillas, es un medicamento antiinflamatorio no esteroideo (AINE) que se utiliza para el tratamiento de la fiebre, el alivio de determinados tipos de dolor y para la reducción de la inflamación de determinadas afecciones como la artritis reumatoide o la gota.
: Los peligros del ibuprofeno para nuestro estómago
¿Cómo afecta el omeprazol al corazón?
La conclusión es que los pacientes que toman omeprazol de forma continuada, tienen el doble de riesgo a sufrir un episodio cardiovascular y concretamente 1.6 veces más de infartos de miocardio, que las personas que no toman omeprazol.
¿Qué pasa si no tomo protector de estómago?
Siempre bajo supervisión médica – Sin embargo, después de haber iniciado un tratamiento con IBPs es importante que el médico vuelva a evaluar el plan de medicación por si es necesario que el paciente detenga o no el consumo. La campaña, que consiste en cápsulas de vídeo en las redes sociales y el reparto de dípticos, explica que el tratamiento de IBPs debe ser «acotado en el tiempo y siempre bajo supervisión médica».
Noticias relacionadas «Un consumo prolongado de este fármaco puede tener efectos adversos para la salud porque la disminución del ácido del estómago puede desencadenar en problemas de absorción de vitaminas, calcio o magnesio y este déficit con el tiempo puede provocar anemia, un aumento de fracturas óseas o bien un mayor riesgo de sufrir infecciones «, señalan los médicos.
El año 2018 en toda Catalunya se dispensaron aproximadamente uno s 8 millones de envases de medicamentos prescritos y financiados por el sistema público y fue el omeprazol el segundo medicamento más prescrito después del paracetamol.
¿Qué tomar para proteger el estómago de las pastillas?
¿Qué son los protectores gástricos? – Omeprazol, lansoprazol, pantoprazol, rabeprazol, esomeprazol son nombres que seguro te suenan y especialmente a todos aquellos que sufrís del estómago. Son los denominados fármacos inhibidores de la bomba de protones (IBP).
Un protector gástrico es un medicamento que se utiliza para evitar los problemas de salud y las molestias que causan los ácidos del estómago, Existen distintos tipos de medicamentos antiácidos y protectores, con particularidades que los diferencian entre sí. Un protector gástrico eficaz es aquel que protege tanto de los ácidos propios de la digestión como del ácido por reflujo,
Y, además, protege al estómago en otras circunstancias. Por ejemplo, cuando se toman medicamentos agresivos que pueden dañar a este Sin embargo, no conviene abusar de ellos, especialmente si no te encuentras en un grupo de riesgo. Los especialistas en patologías digestivas advierten de que el uso de estos fármacos como protectores gástricos en los casos de consumo de antiinflamatorios no esteroides y ácido acetilsalicílico debe estar limitado a los grupos de riesgo.
- La Sociedad Española de Patología Digestiva (SEPD) recuerda que estos medicamentos son eficaces para determinadas enfermedades del aparato digestivo y también cuando se utilizan como protector gástrico en pacientes con algunas patologías y bajo control médico.
- De hecho, han supuesto una revolución en el manejo de las enfermedades relacionadas con la secreción de ácido clorhídrico del estómago como úlcera gástrica, úlcera duodenal, enfermedad por reflujo gastroesofágico o infección por helicobacter pylori.
El elevado consumo de estos fármacos se debe a que generalmente son muy recetados como gastroprotectores a personas que consumen antiinflamatorios no esteroides, como el ibuprofreno y el ácido acetilsalicílico. Son personas normalmente de edad avanzada, con enfermedad crónica y que toman estos medicamentos de forma prolongada.
- Y como la aspirina y los antiinflamatorios no esteroideos pueden producir pequeñas úlceras en el estómago y el duodeno, para que éstas cicatricen más rápido, los médicos recetan estos fármacos que frenan la producción de ácido clorhídrico.
- Es el médico el que debe prescribir o dejar de prescribir el medicamento, y valorar los riesgos y los beneficios para cada paciente,
Según los especialistas de Ribera Salud, no todas las personas que toman aspirina o antiinflamatorios no esteroideos deben consumir estos fármacos, sino solo aquellas que forman parte de grupos de riesgo. Es decir, mayores de 65 años, con antecedentes de enfermedad ulcerosa péptica, que toman antiinflamatorios en altas dosis o combinación de varios y que toman anticoagulantes o corticoides en dosis altas con patología previa grave como cirrosis hepática o insuficiencia renal.